Estoy HARTA de la presunción de heterosexualidad, del machirulismo que os hace creer que podéis disponer de todas las tías que os dé la gana y molestarlas mientras intentan hacer tranquilas su vida a su rollo. Harta de que no entiendas que, por mucho que estemos en el bus, lo que acabas de hacer es un clarísimo ejemplo de acoso machista callejero. ¿Sólo me mandabas un beso tocando mi chaqueta? Estás ciego a tus privilegios, que te inclinan a pensar que puedes invadir tan tranquilamente a alguien de ese modo tan violento sin esperar respuesta. Te vas a ir a la mierda todas las veces que quieras. Y que se entere toda la gente que hay alrededor, que sepan que eres un agresor, un acosador, un machista de mierda que cree que, siendo un desconocido, puede apartarme de mi agradable empanamiento, igual esperando que a tu intento de «flirteo» (como quizá lo llamarías tú) yo respondiera sentándome sobre tu polla o quedándome en plan “ay, qué encantador”. No hay más ciego que el que no quiere ver. O renuncias a tus privilegios de macho o te los arrebato uno a uno.
A mi «amado» (ejem, ejem) acosador de esta noche. O a cualquier acosador machista que ronde las calles, los transportes públicos, los lugares de estudio o de trabajo…
20 noviembre, 2014 por linebacker59
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